Numen



Numen de For Use, Instalación París.

¿Por qué dejaste de escribir, alma en pena? por qué no recurres a tu vía de escape, a tu salida por la puerta de emergencia. La compartíamos ¿recuerdas? las letras, la sensibilidad, la soledad.
¿Estás vacío y no tienes nada que decirle al mundo? No lo creo, tú siempre ofreces algo al minutero, especialmente malo, pero eso me gusta.
Dime... ¿qué reconcome tus sesos? cuéntalo en forma de versos transeúntes, música mortuoria; necesito cargarme las pilas con algo nuevo. Sorpréndeme.
Te ansío como un recuerdo férreo, inteligible y brumoso. Te reconozco, que no lo quiero. Quisiera apartarlo de mí pero hay cosas que no elegimos y tristemente, volvemos la vista atrás buscando un resquicio de lo que fuiste, de lo que fui.

Necesito ver que sigues vivo ¿me das algo? me encuentro en un callejón sin salida, las ventanas están cerradas a cal y canto, al igual que las puertas. Miro al cielo pero no me dice nada, estoy perdida y ya no encuentro tu mirada para abandonarme por las calles en el vaivén de tus palabras.